Sobre la Psicoterapia Virtual

Lo prometido es deuda. Hace tiempo había hecho un comentario en la entrada del Rube sobre mi próximo post, en el prometía hacer una entrada con un tono más cómico. Ahora me encuentro en un problema puesto que el tema que me interesa postear no se da para hacerlo pasar como algo cómico, igual podría haber utilizado la técnica random del Ozo con una chica de buen ver y una frase ingeniosa pero la copia de esa técnica sería muy burda (aunque hay quienes me consideran todo un profesional en eso de las copias burdas, sobre todo burdas, las más de las veces ni parecen copias). Sin embargo para cumplir mi promesa con algo que no sea burdo y mucho menos una copia haré uso de una imagen de la página www.morenewmath.com de Craig Damrauer que se relaciona con el tema. Bueno, sé que a muchos probablemente les parezca más gracioso el inicio de esta entrada que la imagen misma pero no importa. Ahora sí, es hora de pasar al tema. En estos últimos días he estado bastante emocionado gracias a la posibilidad de participar en el Programa de Verano de Investigación denominado Delfín. Parte de este programa consiste en pasar un mes y medio durante el verano como asistente en una investigación escogida por el propio interesado. Mientras buscaba a que proyecto integrarme encontré uno sobre Ciberpsicología (tema que me agrada bastante) en la UNAM. La página que me proporcionó la investigadora mostraba una línea titulada "Psicoterapia en línea.- Una alternativa para la formación profesional en Psicología Clínica". Ese fue el que más me interesó pero últimamente le tengo aversión a la Psicología Clínica (gracias Profr. Bernardo Jiménez) así que lo deseché de mis opciones. Finalmente me decidí por un proyecto en Ensenada sobre Apropiación de Espacios Públicos (Psicología Social, yeah). Al día siguiente de mi búsqueda de proyecto platicaba con mis compañeros psicólogos sobre las alternativas que podría brindar la psicoterapia en línea. Lo que encontré me frustró un poco. La mayoría de los reunidos no veían en este formato un nuevo espacio de acción, su opinión es que tenía altas limitantes y además que era despersonalizante. Esto último fue lo que caló. Que alguien insista que estar en la computadora hablando con una persona despersonaliza me resulta aberrante. Es como si por el simple hecho de haber una mediación tecnológica entre los sujetos hubiera por arte de magia algo que te convirtiera en una "no persona". ¿Y donde queda el teléfono, el telégrafo, el periódico y la televisión? ¿Y donde queda la Universidad Virtual, la graciosa (y paradójica) intimidad de la web 2.0 y las charlas nocturnas del messenger? Dudo que esto me quite identidad como persona, es más, al contrario, es justamente todo esto lo que me ha ido construyendo en gran parte al menos en los últimos 9 meses. Gracias al Internet mi interés por las ciencias y la tecnología ha ido en aumento, la triangulación de información para formarme un criterio es constante gracias al Twitter, Google y demás herramientas, etc. De hecho el mismo concepto de despersonalización me parece muy cercano al de Cordura o Salud Mental en el sentido de que lo que en verdad se pone en relieve son una serie de valores instaurados por las clases hegemónicas y donde cualquier valor que sea contrario o diferente a los suyos es considerado en un sentido negativo (gracias Profr. Jorge Gastón). Me recuerda de alguna manera otra ecuación de Craig: